Desmembramos el juego más salvaje de la presente generación y una de las apuestas más hardcore de Wii.

Platinum Games, compañía de reciente creación en la industria del videojuego, gestada al recelo de Capcom y fundada por cerebros del extinto estudio Clover como Shinji Mikami, Hideki Kamiya o Atsushi Inaba, se estrena con esta peculiar, violenta y atractiva propuesta.

Con una estética de cómic contemporáneo y un desarrollo ultra violento, este juego exclusivo de Wii esfuma la indiferencia de cualquier opinión vertida durante todo este tiempo. Utilizando una paleta cromática reducida a tres colores -monocromo más rojo sangre-, Madworld muestra en escena una calidad artística de la que pocos juegos pueden presumir, y lo hace de forma explícita al gusto del jugador.

MadWorld no es un producto para todo el mundo, no apto para un publico casual habitual de la consola de Nintendo, ni tampoco para menores. Con una trama adulta cargada de suspense, la violencia vestida de humor negro es el vehículo en el que se desvelan los oscuros secretos...

Juegos como MadWorld son la prueba evidente de que en el mundo del videojuego hay cabida para todo tipo de público, siendo Madworld una pequeña obra de arte no apta para cualquier paladar, pero plenamente disfrutable por aquellos que sean capaces de ver más allá de la violencia explícita. Sin embargo, las virtudes del juego no pasan por su parte jugable pura: Jack es lento, de movimientos erráticos y saltos imprecisos, y el 99% de enemigos torpes y bobos, puestos ahí para que los matemos con saña y a mala idea, no suponen un reto en absoluto. En resumidas cuentas, Madworld es un juego que encantará al sector hardcore de la comunidad jugona, cada forma de matar, cada detallado escenario, cada jefe final mantiene completamente pegado frente al televisor y consigue que nos lo pasemos en grande la primera vez. Posteriormente podemos optar por el modo difícil y desbloquear todos los desafíos sangrientos, alguno de los cuales requiere que sudemos la gota gorda con combos determinados para obtener el máximo nivel de eficiencia asesina. Con talento y buen hacer, nos encontramos con uno de esos videojuegos de autor de los que suelen huir las grandes productoras resultando ser pura expresión plástica, a la par que se desarrollan profundamente los personajes como en la mejor novela negra, desde un enfoque artístico brutalmente sangriento y lo que es mejor, macabramente divertido. Sin embargo, adolece de una jugabilidad discreta en comparación con sus colegas del género y la banda sonora puede llegar a irritar en ocasiones. Pese a ello, resulta uno de los lanzamientos más importantes, carismáticos y con personalidad del catálogo de Wii este año, y compra obligada por todo jugador tradicional bien curtido.

La historia del juego deja claro desde el primero momento por donde van los tiros del juego: en un futuro cercano, un grupo consigue aislar Varrigan City, cortando los puentes que lo comunicaban con el resto del mundo. A pesar de los intentos de la policía e incluso el ejército, el barrio se queda bajo el control de sus nuevos dueños, convirtiéndose en una ciudad sin ley. Como hay gente que sabe sacar provecho, una asociación llamada Death Watch organiza un concurso de televisión muy especial. Este programa sigue atentamente todo lo que pasa en la ciudad, gracias a cientos de cámaras de televisión que graban todas las peleas que se produzcan. Y es que el objetivo del concurso es ascender en el ranking del programa, para lo que hay que dedicarse a matar a otros concursantes que estén por encima de nosotros. Aquí es cuando aparece nuestro protagonista, Jack, quien al poco de llegar y gracias a sus aptitudes, consigue un patrocinador que le apoye. A partir de ahí, su objetivo será subir en el ranking, aunque poco a poco iremos descubriendo que esconde más de lo que parece en un principio.

Madworld ha generado mucho ruido antes de su lanzamiento, y después de jugarlo, podemos decir que es merecido, aunque el resultado podría haber sido mejor. El juego ofrece una estética muy especial que es sin duda un gran acierto y que encaja totalmente con la experiencia jugable que Platinum Games ha querido ofrecernos. Lamentablemente, y aunque la fórmula funciona, no puede evitar caer en la monotonía pasadas unas horas, algo que aunque no llegue a alejarnos del juego, si evita que se convierta en el gran título que muchos esperaban. Aún así el juego es tremendamente divertido y las horas que nos mantenga pegados a él serán muy intensas, por lo que nadie al que le guste descargar adrenalina debería perdérselo.

... reconocer que sí, que con toda probabilidad, Madworld es EL juego de Wii.

Madworld no reinventa las normas del brawler o el hack n' slah. De hecho casi diríamos que es una culminación del género, por tanto resultará sencillo a quienes endurecieron sus callos con títulos del calado de Devil May Cry o el ya mencionado God Hand. Hay títulos que repiten clichés de manera vergonzosa, que plagian pautas ya vistas sin ningún descaro y los hacen aburridos, pero MadWorld logra que el 99% de sus obviedades resulten un merecido homenaje. Bastará encontrarse con el gigantesco Litlle Eddie, el ninja Shogun o el Cowboy Jude the Dude para revisitar grandes jefes finales de la historia del videojuego...y sin embargo nos parecerán totalmente nuevos. A mitad de fase, como si de un encapuchado con sierra eléctrica en Resident Evil 4 se tratara, tenemos enemigos mas puñeteros como los Big Bull Crocker, marcando la diferencia entre la habitual carne de cañón y el reto moderado. Como es de esperar, fase tras fase la dificultad aumenta y debemos repetir escenarios (3 vidas en cada uno y a comenzarlo desde el principio si las perdemos), nuestra rabia aumentará, tendremos que pararnos a pensar en los puntos débiles de cada final boss, ver qué nos hemos perdido y por dónde tenía que ir.... como tiene que ser.

Pensamos que MadWorld reúne muchas y meritorias claves para lograr un éxito tremendo y que podría ser un auténtico vendeconsolas para todos aquellos que aún desconfían de Nintendo y su política ya habitual de lanzamientos para nuevos clientes. El inconveniente más evidente quizás sea su duración, que no va más allá de las 6-8 horas si vas directamente al grano. Con todo, el tiempo dirá si, como ya ha sucedido con otros tantos juegos valientes y arraigados en la vieja escuela, al final serán cuatro gatos los que se hagan con él. Pero lo que sí es seguro es que lo van a gozar de lo lindo.

Desde hoy ya podemos definir a Wii como la consola de las dos caras. Dulce, inocente y colorida en títulos como Wii Music o Animal Crossing. Adulta, sangrienta y realista en videojuegos como Dead Rising o The House of the Dead: Overkill.

La última locura de SEGA y, con toda seguridad, la más sanguinaria de su historia, ya está aquí para manchar nuestras pantallas de rojo. Motosierra en mano, Jack "a secas" es el personaje encargado de llegar hasta el final de este dantesco espectáculo de masas. A su lado, nosotros, que le dirigiremos desde una perspectiva en tercera persona a través de cinco mundos y catorce niveles de recorrido lineal. Los eventos "quick time" son la tónica habitual de un videojuego donde el binomio wiimote-nunchuk cobra un gran interés. Pocos videojuegos logran usar con tanto acierto los controles de Wii. Un modo multijugador para dos jugadores basado en 12 minijuegos y un modo de dificultad adicional proporcionado una vez completado el videojuego son algunos de los añadidos para aumentar la duración del título.

La televisión critica continuamente a los videojuegos, pero MadWorld literalmente destroza, humilla y condena a lo peor de la televisión. Violencia con sentido en un videojuego completo en todas sus facetas y que logra demostrar que títulos adultos e interesantes para Wii son posibles. No sólo es una de las obras de autor más visceralmente impactantes que hemos recibido, sino también la potente entrada de Platinum Games en el mercado del ocio electrónico.

MadWorld nos ha sorprendido muy gratamente gracias a una historia más profunda de lo esperado y especialmente ante un sistema de juego profundo, variado y muy divertido que utiliza la violencia para incrementar las dosis de acción y diversión, pero no simple y llanamente para llamar la atención de los usuarios. Indudablemente, ni su estética ni su desarrollo encajarán precisamente con todos los públicos. La calificación por edades deja bien claro a quién debe dirigirse y por tanto no deben existir polémicas absurdas acerca de su contenido. MadWorld se convierte por méritos propios en quizás el mejor juego de Wii en 2009 hasta la fecha.

“Nadie se había atrevido a hacer algo parecido a MadWorld”

MadWorld podría resumirse como la fusión entre No More Heroes y Manhunt: Salvaje, directo y sangriento como él solo.

Llama la atención que en una época en la que los Medios Difamadores Informativos atacan y atacan a los videojuegos, estén saliendo tanta cantidad de juegos extremadamente violentos y, además, de una grandísima calidad. Y encima, dos de los mejores, The House of the Dead: Overkill y MadWorld, son exclusivos para la consola más casual del mercado. Parece ser que la Industria del Videojuego ha madurado mucho más rápido que la opinión pública.

Jarabe de plomo.

Hace algo menos de un año, SEGA lanzaba un globo sonda con House Of The Dead 2 & 3: Return en la actual sobremesa de Nintendo. Dadas las buenas ventas, la compañía del Erizo Azul optó por desarrollar una entrega específica con el Wiimando por bandera. El resultado es Overkill, o lo que es lo mismo: Acción, sangre, humor negro y frenesí de tiros con sabor a arcade clásico para goce y disfrute del jugador tradicional.

El nivel visual en esta entrega para Wii, sin duda sobresale de la media de su catálogo. El hecho de seguir el esquema clásico de juego de puntería sobre raíles, ... permite dotar de mucho mejor detalle al entorno, traduciéndose en texturas nítidas, modelados ricos en geometría, y escenarios cargados de detalle. La totalidad de los enemigos luce bastante bien incluso cuando los tenemos encima sin importar la lejanía de donde salgan a nuestro encuentro...

Pero donde realmente ha puesto SEGA toda la carne en el asador ha sido en el diseño artístico. El juego rezuma a retro y años ochenta por los todos sus poros, se ha implementado además un filtro que le da aspecto como si estuviésemos visionando una película ... de hace dos décadas, queda muy bien y además sirve para tapar defectillos técnicos. También el juego está plagado de guiños no sólo al cine de aquél entonces, sino a la propia saga e incluso a clásicos de SEGA de la época, y para muestra un botón: en uno de los niveles cruzaremos una sala repleta de máquinas recreativas, y a nada que nos fijemos podremos ver arcades tan míticos como Out Run o Space Harrier II. La banda sonora no se queda atrás en este constante homenaje con temas de rock setentero, jazz psicodélico, rhythm ´n blues, gospel o drum ´n bass que amenizarán cada nivel, resultando uno de los aspectos que más destacan en el juego y que sin duda hará las delicias de los jugadores con una edad más que respetable.

... los defectos típicos de un juego como el que nos ocupa, es la escasa duración del modo campaña. Otro defecto importante ha sido el de añadir continuaciones ilimitadas pensando en los jugadores noveles, algo que en nuestra opinión le hace un flaco favor a un juego que aboga por una jugabilidad retro, basada en la habilidad y el conocimiento de los peligros que esperan a la vuelta de la esquina para superarse a uno mismo en cada partida. A pesar de todo SEGA ha añadido algunos minijuegos para alargar la vida del título, y si bien el modo historia podremos completarlo junto a un amigo, en los mentados eventos otros dos colegas más podrán unirse multiplicando la diversión.

No nos cabe la menor duda de que un veterano del género va a saborear hasta la última gota de Overkill, pero no estamos así de seguros con los jugadores ocasionales o con aquellos no experimentados en el género, haciendo que su mayor virtud -la cual es repetir las fases incontables veces para reventar records- se convierta en defecto...

En esta ocasión nos encontramos con un juego de la franquicia que presenta unas cuantas novedades. La primera y más evidente es que este juego ha sido concebido directamente para consola, es decir, no ha pasado por las máquinas recreativas. Por otra parte el juego cuenta con una estética que se aleja de lo visto hasta ahora en la saga, inspirándose en las películas de serie B de zombis.

Sin duda este nuevo estilo ha sido un gran acierto y le da una gran personalidad. La historia, narrada a través de secuencias cinemáticas que nos recuerdan a las películas malas... será bastante típica y simple, aunque está contada con mucha gracia, especialmente por los diálogos. Eso sí, debemos advertir que aunque el juego no es excesivamente violento, si contiene lenguaje malsonante de forma habitual, hasta el punto de que puede llegar a resultar desagradable, lo que hace que esté dirigido a un público adulto.

En el apartado gráfico el juego se encuentra bastante cuidado, con una gran cantidad de efectos aplicados y unos efectos de post procesado que hacen que el juego se vea como una película antigua. Lamentablemente, y aunque durante la partida los modelos de los personajes se ven bastante bien, en las secuencias de videos estos se muestran insuficientes. Por otra parte, los escenarios tienen bastante detalle y muy buenas texturas, aunque lo cierto es que son bastante estáticos, y apenas hay elementos con los que interactuar. El apartado sonoro también tiene una gran personalidad, con canciones bastante adecuadas al estilo de juego y a su ambientación.

House of the Dead: Overkill es un juego que ha sabido continuar la saga dándole una personalidad propia y haciéndole destacar frente a otros competidores del género. Quizás sea demasiado clásico y se echen en falta ciertos elementos pero lo cierto es que la fórmula funciona... Quizás pueda resultar algo corto, pero lo cierto es que es bastante más largo que la mayoría de los juegos del género.

Hace ya años que hemos asistido al declive y decadencia de los juegos de puntería. Tiempo atrás disfrutaron de bastante popularidad... pasada la fiebre inicial fueron desterrados al olvido y desaparecieron ante el imparable avance de los shooters en primera persona. La saga The House of the Dead no ha sido ajena a dicha situación... Pero al final la franquicia de SEGA ha encontrado un estilo que le permite afrontar futuras entregas con cierta garantía de éxito. Y lo hace en Wii, una consola ideal para un juego de estas características

...resulta evidente que las películas de Quentin Tarantino y Robert Rodriguez (especialmente Planet Terror, por razones obvias) han sido una gran fuente de inspiración para el equipo de Headstrong, ya no sólo por la estética de cinta desgastada y con defectos, sino también por elementos como la música o el sentido del humor. Overkill es, además, uno de los juegos que se hacen más merecedores de llevar la etiqueta "para mayores de 18 años" en su portada, tanto por el alto grado de violencia explícita que contiene como por su abundante lenguaje soez, con diálogos al más puro estilo Tarantino.

Técnicamente no se puede reprochar nada al trabajo realizado por Headstrong. Overkill aprovecha al máximo la limitada capacidad gráfica de la consola de Nintendo para mostrar un buen número de variados enemigos en pantalla y unos escenarios bien detallados. El precio a pagar son ralentizaciones esporádicas y un clipping bastante exagerado cuando los enemigos caen tras nuestros disparos. El motor gráfico, en cualquier caso, es un buen ejemplo de optimización e incluso se permite el lujo de representar algunos efectos gráficos (como motion blur o trucos con la profundidad de campo) en teoría reservados para sistemas más potentes. Lo único que hemos echado en falta es una mayor interacción con los escenarios...

El gran fallo del apartado sonoro está en las voces. El problema no es tanto que el juego no esté doblado al castellano (lo cual no echaremos demasiado en falta, gracias al excelente trabajo de los actores), sino que sólo se han subtitulado las cinemáticas, lo cual hará que muchos jugadores se pierdan los tremendísimos diálogos que intercambian los dos protagonistas mientras se desarrolla la acción.

No podemos sino rendirnos ante los encantos de uno de los mejores juegos que se han publicado para Wii durante los últimos meses. Puede que no sea revolucionario, pero Overkill es un excelente ejemplo de diversión inmediata.

Overkill es un espectáculo retro de disparos "on the rails" desenfrenado y muy entretenido que nos lleva por los cauces de la jugabilidad más simple hasta una estética visual propia de las películas de terror de los años sesenta.

Un conjunto bastante apetecible aunque con altibajos que van desde un apartado sonoro simplemente descomunal -aspecto realmente importante en este tipo de videojuegos- hasta unas caídas de "frame rate" problemáticas que lamentablemente enturbian un trabajo que, de otra manera, hubiera marcado un antes y un después dentro de la serie The House of the Dead.

SEGA y Headstrong Games ponen el estilo de la saga The House of the Dead patas arriba para ofrecernos un "overkill" de acción entretenido, algo innovador y no demasiado duradero. No obstante, su delirante humor y atractiva estética retro consiguen un espectáculo de disparos "on the rails"...

The House of the Dead: Overkill es uno de los mejores shooters onrails de todos los tiempos.

Un homenaje indispensable a las series de policías de los años 80, al cine gore, a las sesiones dobles, a Planet Terror… ¿Cómo reinventar una saga y el género en el que ésta se sustenta? La respuesta, al menos en el caso de The House of the Dead: Overkill, ha sido potenciar la ambientación. Con un estilo muy ochentero y gamberro, toneladas de gore, unas voces impagables, unos personajes inolvidables, el juego desarrollado por Headstrong Games consigue no aburrir en ningún momento, a pesar de que la mecánica de juego sigue siendo, en esencia, la misma de siempre. Y eso tiene mucho mérito.

The House of the Dead: Overkill debería ser considerado como una de las grandes joyas del catálogo de Wii y de la actual generación en general.

Condemned 2 es un juego muy bueno. La nueva obra de Monolith Software y Sega asalta Xbox 360 y PlayStation 3 logrando cumplir sus promesas y convertir lo que era un interesante título suelto en una serie que puede depararnos muchos éxitos y satisfacciones. Pocos títulos son tan oscuros, terroríficos y desconcertantes sin caer en tópicos y profundizando hasta semejante punto en la psique de su personaje, algo que se reserva sólo los mejores survival horror.

Con un argumento muy potente, un aspecto impactante, muchas novedades jugables, una nueva investigación forense dinámica muy bien elaborada y, en general, una presentación cinematográfica espléndida, Condemned 2 es una compra obligada para todos los amantes de los survival horror. Una pena que no se haya pulido un poco más su sistema de combate, muy poco preciso y demasiado importante, así como que no se hayan cuidado un poco más esos modos de juego extra que parecen un tanto fuera de lugar con respecto a la ambientación general del juego.

A este título le ha faltado un pequeño empujón, pero no por ello deja de ser un título altamente recomendable. Este año van a llegarnos muchos pesos pesados, pero desde luego Condemned 2, aún a pesar de ser el primer valiente en dar el paso al frente, les ha puesto las cosas muy difíciles a los demás. Los usuarios de PlayStation 3 podrán disfrutarlo sin problemas aún sin haber jugado al primero, aunque sin duda es recomendable conocer bien el original para explotar el título.

Lo primero que llama la atención de Condemned 2, tanto en esta versión final como cuando lo vimos por primera vez, en el E3 del año 2007, es la sensacional ambientación que Monolith ha logrado. Desde el extraño primer nivel nos vemos inmersos en una ciudad oscura, decadente y misteriosa. A esto ayuda la gran cantidad de elementos en pantalla, el sensacional diseño de edificios y entornos, con un toque entre corrupto y ruinoso, y en general toda la estética pulp del juego, además de la perspectiva constante en primera persona y la gran cantidad de interacción existente en el juego, no ya solo en combate o con el escenario, sino también a la hora de hacer análisis forenses, responder vía radio, o interactuar.

Condemned 2 es un gran juego de acción en primera persona, que mejora lo visto en el título anterior aunque, como éste, no es un juego para todos los públicos. No se trata de su ambientación, pues el terror o lo pulp es algo habitual, sino de su originalidad como juego de acción en primera persona, algo que no resulta muy común en consola, donde el género está superpoblado. Aún así, los fans del original, y los jugadores en busca de cosas nuevas, pasarán un gran rato con este Condemned 2, que mejora al anterior en todos sus apartados y cuenta con un original modo multijugador y el ya comentado modo de pelea de borrachos donde podemos pasarnos horas intentando ser el más fuerte del callejón. Una fantástica mezcla de acción y suspense que destaca por ser diferente a los demás.

“Condemned 2: Bloodshot” es un buen juego, que gana puntos a medida que se avanza en la trama, y que contiene elementos de múltiples géneros tratados con mucho cuidado. Así, no podemos definirlo como un shooter clásico, pero tampoco asegurar que sea un survival, ya que incluso tiene algunas características de los juegos de lucha. Pero, ante todo, nos encontramos ante una aventura con un potente argumento, muy cuidado, que apuesta por la exploración e investigación, la interacción con el escenario y enemigos y, sobretodo, el terror más puro: el que puede aportar una perspectiva en primera persona.

Condemned 2 es una notable segunda parte, y funciona a la perfección como elemento complementario para su predecesor, tanto en lo jugable como en su argumento. El desarrollo se orienta en momentos concretos casi hacia el espectáculo de fuegos artificiales algo vacío, perdiendo completamente el hilo algo más minimalista de la saga, sin embargo la experiencia resulta igualmente satisfactoria, y la brutalidad y lo sórdido de su ambientación nos mantiene morbosamente pegados a la pantalla. Un título, en definitiva, no apto para todos los públicos, que en ocasiones desafiará nuestro aguante y que precisamente encuentra su mayor fortaleza en lo extremo de su propuesta.

Codemned 2 es un muy buen juego, y aunque posee una cierta cantidad de defectos poco importantes, se sostiene perfectamente como una producción ambiciosa y bien lograda. Sin duda alguna hay cosas que se podrían mejorar, pero es una dignísima secuela, mucho más compleja e interesante que la primera parte, para amantes de las emociones fuertes y la violencia gratuita.